JARDINS DE LA PRIMAVERA I PARC DE NETEJA DE LA ZONA SUD

In collaboration with Patrizia Falcone – Parcs i Jardins, Ajuntament de Barcelona.

FAD 2008 Award – Finalist

V European Landscape Biennial 2008 Rosa Barba European Lanscape Prize – Selected

X+Verd 2007 Prize – Winner

Uncontested Exhibition UCLA 2007 – Selected 

SAIE 2010 Prize – Selected

Situated between the Poble Sec neighbourhood and Montjuïc Park, prior to its transformation, the 2-hectare site had an irregular, sloping topography. The district’s last remaining significant public plot, it was cleared of an inactive carbon factory and debris.

An Urban Improvement Plan allowed for the placement, largely below grade, of a two-storey 4,300m2 building: an urban waste transfer facility for the street cleaning brigade. A 90-metre-long building integrated with the gardens above, its design sought to resolve a broad set of requirements within a pre-determined envelope with a sole, north-facing facade for natural light and ventilation.

The challenge of a single façade led to the design of a double skin: an inner layer of opaque thermal wall or glazing as needed, and an outer layer of perforated prefabricated concrete panels.  These bespoke precast panels were fabricated locally and assembled on site in just over a week.

Through the modulation of the panels and location of entrances, a hostile urban block is transformed into a well-lit route through the park. The panels act as a new garden wall that becomes a lantern at night. They camouflage, without negating, the semi-industrial building within.

The brawny alveolar roof slabs support the loads of the gardens above this 24/7 facility with three shifts, sixty street-cleaning vehicles, staff offices, etc. Three large-capacity hermetic containers daily transport compacted debris to landfills outside the city, reducing the trips formerly made by smaller trucks.

Carried out in collaboration with the Parks and Gardens Department, continuity with Montjuïc Park was critical to the success of the combined infrastructure and green space.  A new landscape of climbing tree-lined paths and platforms, resolves one of the district’s longstanding problems: it’s physical connection to the park.

El terreno de dos hectáreas, donde se construyeron los dos equipamientos, se sitúa entre el tejido residencial del barrio del “Poble Sec” y la vertiente norte del Parque de Montjuïc y presentaba una topografía muy accidentada y un fuerte desnivel. Gran parte de la parcela, de titularidad municipal, estaba cubierta por construcciones en ruinas escondidas por vegetación espontánea.

Partiendo de la topografía existente y de la plataforma creada por la cubierta del centro de transferencia, “Parcs i Jardins” diseñó una nueva zona verde, con infraestructuras e instalaciones de jardín urbano en sintonía con la fachada del nuevo edificio, garantizando al mismo tiempo la continuidad con el resto del espacio verde ya que uno de los retos más importantes fue resolver la conexión para peatones

El desarrollo de este recorrido hizo necesaria una adaptación importante de la topografía con movimiento de tierras considerable, generando un sistema de terrazas y taludes, que se sostienen con la ayuda de diversos muros de gaviones. El resultado son unos jardines prácticamente verticales, orientados a las viviendas situadas en las calles inferiores que configuran un nuevo telón verde en el barrio. Estos jardines actúan como transición entre el barrio del “Poble Sec” y el verde más frondoso y salvaje de la montaña de Montjuïc.

En la terraza situada en la zona inferior del parque, sobre la cubierta del “Parc de Neteja”, se ubica un área de juegos infantiles. El “Parc de Neteja”, un edificio de 4.262m2  bajo el parque que queda integrado en el territorio, se desarrolla en dos plantas y cuenta con una fachada de 90 metros de largo. Fue la ejecución de un Plan de Mejora Urbana la que ha permitido embeber en el terreno este nuevo equipamiento destinado a centro de transferencia de desechos de limpieza viaria de “Poble Sec” y de “Ciutat Vella”.

El encargo del edificio planteaba un complejo programa de requerimientos: un gálibo determinado, el imperativo de no incorporar iluminación cenital, y una única fachada a Norte que tenía que resolver las necesidades de iluminación y ventilación de un programa interior muy diverso (acceso de personal y de camiones, oficinas, zona de camiones, aulas, vestidores, E.T., instalaciones…). Se buscó un sistema de doble piel con paneles perforados prefabricados de hormigón, capaz de adaptarse a todos los requerimientos de la fachada: un sistema sencillo para un programa complejo. Con este sistema y la colocación de los accesos de camiones y de personal en los extremos del edificio, se ha conseguido mediante un juego geométrico de luces y sombras, transformar un lugar oscuro y hostil, en una calle iluminada por la noche y de lectura no tanto de edificio sino como de muro de jardín.

El edificio en sí es una potente estructura que soporta las cargas del parque y que en su interior acoge los vestidores y servicios de los trabajadores, un centro de información para vecinos, las oficinas del centro y espacios pare el mantenimiento y lavado de vehículos. Incorpora también, tres contenedores estancos para la compactación de basura, que son retirados cada día, y está dotado de un innovador sistema de filtrado de sólidos en suspensión. Las aguas freáticas que se utilizan en el edificio, tanto para llenar los camiones-cisterna, como para la limpieza, provienen del pozo de captación del Teatre del Liceu.

Disfrutan de los nuevos jardines tanto gente del barrio como los paseantes que van y vienen del parque de Montjuïc. Las antiguas aceras, sucias y rotas, se han transformado en caminos agradables de recorrer. La manzana, que antes nos impresionaba por su estado salvaje e impenetrable, se ha transformado en un nuevo y bien utilizado espacio verde que ha dado lugar a una nueva “fachada-muro-de-jardín” que día y noche da vida al barrio.

 

Barcelona, 2004-2007

Photographer, Lourdes Jansana Ferrer 

and Lluís Andreu Sotelo